Niña de fuego
Desde Sevilla, uno de los grupos más inclasificables del rock español: Pony Bravo. Dos discos les han valido para hacerse un hueco entre las preferencias de crítica y público, dentro de la escena indie. La mezcla de estilos, las letras plagadas de ironía, recitadas como mantras, evolucionando con la música, el poliinstrumentismo de Pablo Peña o Darío del Moral, la particular voz de Daniel Alonso… Pony Bravo son una rara avis en el panorama musical no solo andaluz o nacional, también estaría difícil encontrarles compañeros de aventuras por ahí fuera. Por suerte.
Generosos y atentos a la evolución de la industria, permiten la descarga libre de sus álbumes, desde la web de su discográfica, El Rancho; otro motivo para tenerlos en cuenta. Quien se anime a prestar un poco de atención a Si bajo de espaldas no me da miedo (y otras historias) y a Un gramo de fe —fácil, no cuesta nada— no quedará indiferente.
Del primero, publicado hace tres años, es esta Ninja de fuego, versión de la copla Niña de fuego de León Quiroga y Quintero que en 1945 inmortalizó Manolo Caracol, interpretada en directo en Nocturama…
Así son Pony Bravo… aunque no solamente.
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